"¿Señor, he muerto acaso?"
"No, hija, vuelve a la tierra que te quedan treinta años más de vida".
La mujer despierta. Decide hacerse lipoescultura, tratamiento de varices, se quita las manchas y las estrías con láser, se estira la cara, se opera senos, piernas, glúteos y todo lo demás hasta verse con al menos veinte años menos.
La mujer sale del hospital, la atropella una ambulancia :
"¿Qué pasó? ¿No dijiste que viviría treinta años más?
"¡Sí, pero, te juro que no te reconocí!"
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